martes, 29 de junio de 2010

ARGENTINA TOMA REVANCHA DEL MUNDIAL 2006.




Argentina clasificó a cuartos de final después de ganarle al equipo mexicano. Si bien el equipo centroamericano no fue tarea facil, ahora cada vez se complica más para alcanzar la tan ansiada meta: obtener la copa mundial. Pero también se cierto que cada vez son más los obstáculos para alcanzar dicha meta, y el primer paso es el partido que se disputara en sábado 03-07-10 a las 11:00hs frente a Alemania...
Buscando en internet, encontre una noticia del sitio de 26 noticias, en el cual se refleja lo que los argentinos sienten al ver que nuestra selección tomará revancha del mundial anterior frente a la seleccion alemana.

La noticia es la siguiente:

Los lectores de 26noticias.com.ar dieron su opinión apenas terminado el encuentro ante México por octavos de final de la Copa del Mundo. La pregunta de la encuesta era: Argentina pasó sin dramas a México; Alemania goleó a Inglaterra, y se medirán en cuartos. ¿Le tiene miedo a los alemanes?...

Los resultados terminaron sorprendiendo a todos. Más del 60 por ciento de los votantes respondieron que le tienen miedo al equipo europeo, mientras que los restantes aseguraron que Argentina es más que los de Löw. Ahora, luego de ver los resultados, no podemos dejar de preguntarnos porqué es que se le tiene tanto miedo a una selección como la alemana.

Lo primero que debemos plantear es cómo Alemania llegó tan lejos en la Copa del Mundo, siendo una de las potencias que menos chapa de candidato mostraba en la previa. Aunque uno debe hacer honor a una frase que circula el ambiente del mundo: el fútbol es 11 contra 11 y siempre gana Alemania. ¿Habrá que creerla?

Sigamos. El conjunto teutón llega a los cuartos de final luego de arrancar en Sudáfrica goleando a una selección muy débil como Australia. Le ganaba 4 a 1 demostrando velocidad, efectividad en ataque, pero sobre todo una característica que nunca se le había visto, juego por abajo y asociado.

Hasta ahí todo bien, de hecho todos los que dábamos a Alemania sin chances en este Mundial tuvimos que quemar nuestros libros y darle la importancia debida al equipo. Llegó el segundo encuentro ante Serbia. Batacazo. Los balcánicos le ganaban 1 a 0, sin jugar bien, pero prendiendo una luz de alarma en el vestuario alemán.

El tercer encuentro terminaba siendo clave. Se venía Ghana, uno de los africanos mejor preparados para este torneo y que más lejos llegaría. El partido era muy parejo y los ghaneses contaban con chances de gol. Hasta que apareció un remate exquisito de una de las figuras de Alemania, Özil, para decretar la victoria. Clasificación y pase a octavos de final.

Vendría Inglaterra, convirtiendo este choque en uno de los más interesantes de la Copa hasta aquí. Y otra sorpresa, Alemania arrancaba ganando 2 a 0, luego todo lo que conocemos, el gol no convalidado a Lampard, y las contras fugaces que encabezaron el citado Özil y Müller. Fue 4 a 1 y paliza para los británicos. El conjunto de Löw se calzaba el traje de candidato, y hecho a medida.

Ahora marcaremos algunas de las cuestiones que lo convirtieron en favorito. Primero cabe mencionar que llegó a Sudáfrica sin su máxima estrella, Ballack, sin ninguno de los dos arqueros más asentados en el puesto (uno de suicidó, Enke, y el otro se lesionó, Adler). Allí el DT tuvo que dejar todo en manos de Neuer, un joven de 24 años, figura del Schalke 04 y que supo aprovechar su oportunidad, salvando su arco varias veces ante los ingleses.

En la defensa es donde menos se parece esta Alemania a la que supimos ver en los anteriores Mundiales. Sus defensores centrales son lentos, no son figuras rutilantes y tampoco imponen miedo en el área rival. Mertesacker (25) es el importante y a su lado tiene a Friedrich (31), uno de los veteranos del equipo, pero que deja muchas dudas en el fondo. Lo distintivo de esta defensa germana son sus laterales: por la izquierda sube su capitán Lahm (26), quién define todas las jugadas muy bien y hasta se anima a probar desde afuera; por la derecha sube Boateng (22), de origen ghanés y nacido en Berín, que impone su presencia en la derecha.

El mediocampo es su arma letal. Allí cuenta con dos volantes de contención. Uno es Schweinsteiger (25), que es el que manda en el círculo central. Llega en ataque y en defensa es muy criterioso, tal cuál demuestra en el Bayern Munich, donde se erigió como una de las figuras. A su lado tiene al reemplazante de Ballack, Khedira (23), otro de los que sorprendió en esta Copa. Entró por la ventana y se quedó con la titularidad, con marca y llegada al área rival. Por la derecha sube y sube Müeller (20), el inesperado goleador de Alemania y que debutó en marzo, precisamente en el amistoso ante Argentina en Munich. Es sin dudas uno de los que más preocupación hay que tenerle, sobre todo luego de su gran actuación ante Inglaterra. Por la otra banda, aunque jugando libre, como una especie de enganche, está Özil (21), que con el 8 en la espalda dejó boquiabiertos a propios y extraños llevando la manija del equipo en ataque y hasta de contrataque, con una velocidad supersónica; sino pregúntenle a Barry, el volante inglés que le sacó el número de patente en los octavos de final. Para temer, y mucho.

¿Arriba? Dos conocidos. Podolski (25) y Klose (32), quizás los dos jugadores emblemas del equipo. Se encargan de definir las situaciones que crean Müller, Özil y Schweinsteiger; pero también dan una mano importante en el pressing que emplea Alemania en la salida de sus rivales. El número 10 creció mucho en su juego y se puso el equipo al hombro tras la lesión de Ballack, mientras que el 11 está a tres goles de ser el máximo anotador en la historia de los Mundiales y cuando le das dos centímetros cambia cualquier situación de peligro por gol.

Este es el análisis minucioso de Alemania, el rival de Argentina en cuartos de final. Ahora que todos nuestros lectores saben cómo juega, quién juega mejor, quién peor y cómo puede darse el partido, sabrán si tener miedo o no. Desde aquí les decimos que enfrente el equipo de Maradona le hace sombra, y mucha, en nombres, esquema y hambre. Sólo falta el pitazo inicial y dirimir la batalla en el campo de juego. ¿Miedo? Eso es para los débiles...


Lo cierto es que todos queremos ser los próximos en ganar el mundial de futbol, y sabemos que no será tarea fácil, pero también sabemos que nuestros jugadores, que están lejos de casa y nos representan ante el mundo entero, necesitan nuestro apoyo y que depositemos toda nuestra fé en ellos, y eso es lo que vamos a hacer.
¡USTEDES PUEDEN!

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